Hoy en día, el Láser es un instrumento que se ha ganado un lugar irremplazable en lapractica en la medicina y cirugía estética, presentándose como alternativa a los peelings químicos u dermoabrasión mecánica, y pudiéndose complementar, e incluso sustituir, técnicas quirúrgicas como las blefaroplastias y liftings faciales.
El rejuvenecimiento cutáneo con laser comúnmente se divide en dos tipos, el ablativo y el no ablativo. En el primer caso, los nuevos sistemas laser para el rejuvenecimiento profundo, nos permiten producir una restitución controlada de capas epidérmicas de la piel y el estimulo de colágeno dérmico. A pesar de ser un tratamiento radical y que por lo tanto requiere de cuidados, sus resultados pueden ser sorprendentes.
El laser no ablativo produce una reacción inflamatoria debido al intenso calor que se trasmite hasta las capas profundas de la dermis (piel) donde se encuentran las fibras de colágeno y elastina haciendo que estas se compacten y reorganicen, y aumentando la producción de las mismas de forma significativa. Estos cambios reducen la flacidez y consecuentemente, borran arrugas y mejoran el aspecto y calidad de la piel.
Sin embargo, desde hace muy poco se viene usando otra técnica de rejuvenecimiento llamado Endolifting Laser, que consiste en pasar una fibra de laser de 2mm por debajo de la piel y a una distancia segura con el fin de estimular el colágeno. Este si es una verdadera revolución en los tratamientos de rejuvenecimiento mínimamente invasivos.
Existen dos condiciones fundamentales para alcanzar resultados satisfactorios en los tratamientos con laser. Primero, contar con un equipo que tenga la longitud de onda y la potencia necesarios para producir los cambios deseados; y segundo, que el médico tenga el conocimiento y la experiencia suficientes pata ofrecer tratamientos adecuados para cada caso, y sobre todo la seguridad que estos tratamientos no le causaran ningún daño.
- Dr. Juan Manuel Cachay
